sábado, 29 de diciembre de 2018

La evolución del oído musical.

   Leonard Bernstein (1918-1990) comentó alguna vez que en la serie de armónicos naturales ("armónicas" en Física), se podría observar la evolución del oído musical de la humanidad, en general, no de individuos específicos, y por lo tanto la aceptación de nuevos armónicos en la composición musical (por supuesto hablando de la música occidental). 

   Y así se pasó de la monodia (canto llano al unísono o a la octava) al organum (armonización de una melodía por quintas perfectas) en el s.IX; de ahí se pasó a la quinta fissa, antecedente de la tríada mayor (término propuesto por Jacobus de Liege) a finales del siglo XIII; para llegar al uso de la séptima de dominante en el Renacimiento, consolidándose como el acorde dominante en los períodos subsecuentes, así como el uso de acordes secundarios de séptima en la música clásica, y la posterior armonía a cuatro partes (séptimas) en la música popular contemporánea. Aunque el uso de novenas comienza en el Romanticismo, el uso sistemático de las tensiones se consolida con el desarrollo del Jazz en el siglo XX. Siguiendo la serie, se llega a la escala cromática (acorde de cromatismo total de Messiaen) y al microtonalismo, de uso en la música clásica contemporánea. Esto se puede apreciar en la serie, que aquí se muestra hasta la armónica 32.


   A nivel personal, la exposición a ciertos géneros musicales con un concepto armónico definido indica el nivel máximo de aceptación de armónicas al que llegarán sus seguidores. Disculpando las excepciones a toda regla, el nivel máximo de armónicas al que están acostumbrados los aficionados al Rock o la música popular tradicional será menor que aquel al que están acostumbrados los que escuchan Jazz o Boleros, por ejemplo, y estos a su vez estarán por debajo de las armónicas que se utilizan en la música Contemporánea (la música "clásica" compuesta después de la Segunda Guerra Mundial). 

   La evolución para la aceptación de armónicas superiores, es un proceso que depende en parte de la música que se consume, aunque se puede acelerar cuando se estudia música, y definitivamente depende del tipo de música, como se ha comentado. 

   Pero ¿qué es la serie de armónicas naturales? 

   A diferencia de los sonidos que se obtienen en un teclado o en una guitarra con trastes (afinación temperada), los sonidos que se obtienen pulsando una cuerda tensa o excitando una columna de aire, siguen una relación diferente. Tomemos como ejemplo la cuerda. Los 'armónicos' que se pueden obtener al rozar la cuerda, se encuentran justo en relaciones que la dividen en segmentos de igual longitud (1:1, 1:2, 1:3, etc) y que no necesariamente coinciden con los trastes en una guitarra. En una guitarra eléctrica se pueden producir con la mano izquierda, cerca de la cejuela, o con la mano derecha, cerca del puente. En una columna de aire es un poco más complejo, pero pueden investigar sobre las concameraciones en tubos abiertos o cerrados. 

   Existe una diferencia entre los sonidos "naturales" y los "temperados". Para empezar, en la afinación natural (la que respeta la serie de armónicas) los sostenidos y los bemoles no son las mismas notas, es decir, no hay enarmonías. Esto supone un conflicto para la gente que aprendió teoría musical desde el punto de vista del sistema temperado y nunca se le advirtió de esta situación. 

   Como la referencia actual es el sistema temperado (ya hablaremos de esto en otra ocasión), las armónicas de las series pueden tener una diferencia con respecto a las frecuencias calculadas mediante el temperamento igual de doce sonidos (porque hay muchos tipos de temperamentos), y por lo tanto se dice que algunas de las armónicas de la serie son calantis cuando están por debajo de la frecuencia temperada, o crescentis, cuando están por encima, pero una cantidad suficiente para generar batimentos desagradables para nuestro oído occidental (mis cálculos dicen que debe haber una diferencia mayor al 1% en cualquier dirección). 

   La consecuencia de esto, es que en los instrumentos de la familia de los metales (Trompeta, Trombón, Tuba, y el Corno), que trabajan con armónicas de la serie para cada longitud de columna de aire que pueda generar, tienen armónicas a evitar, por lo que deben buscar ese mismo sonido como una armónica diferente en otra longitud de columna de aire (lo cual controlan con sus pistones). 

   Los instrumentos de cuerda (Violín, Viola, Cello, Contrabajo) no tienen problema para igualar los sonidos temperados, y sin embargo, se sabe que en la orquesta ajustan un poco la distancia para las sensibles, por ejemplo, ya que eso da una sensación más fuerte de resolución. 

   En fin, continuaremos con esto en futuras publicaciones. 
   Hasta la próxima.